La segundas partes nunca fueron buenas

La segundas partes nunca fueron buenas

jueves, 17 de noviembre de 2011

you will always be with me

Siempre pasamos buenos ratos, creo que ninguno fue malo... Ya que lo bueno siempre perdura en la memoria. 

Aún recuerdo aquellas sonrisas que me sacabas cuándo querías, haciéndome cosquillas una y otra vez. Creo que nunca podré olvidar aquellas tardes que me cuidabas y hacías de ti un padre para mí, que ilusa, que inconsciente era...

Ojalá tu paso por mi vida no se hubiese resumido en un corto año, ojalá pudiese haber sido consciente de que te tenía que aprovechar hasta el final y que quizás me arrepentiría de no haberlo hecho, como lo hago ahora, cosas de niñas supongo... Porque yo, no era más que eso, una niña que solo quería jugar, que lloraba por todo, que te hacía rabiar.

No sé como lo hice, pero aunque te habías ido te quedaste conmigo, esas tardes permanecieron y tus ganas de hacerme feliz también. Que pena que no me acuerde de nada... Porque es cierto, me encantaría expresar aquí todo lo que sentí por ti una vez, pero inevitablemente no me acuerdo. Todo se ciñe a una foto.


Y después de que me abriesen los ojos, y después de que te permanecieran presente en mí todos los días de mi vida, comencé a quererte como si lo hubiese hecho desde siempre, desde el primer día en que nací, porque así lo había hecho y así lo comencé a hacer de nuevo.

Volviste a aparecer en mi día a día, sin duda alguna, fue uno de los mejores regalos que me habían hecho hasta ese momento y hasta ahora mismo, aunque estoy segura que nunca habrá otro regalo que lo iguale, o si, pero ese regalo sería poder abrazarte y volver a hablar contigo. Ese regalo fue verte, verte en mis sueños noche tras noche, escucharte hablar y sentir que me querías. Era inexplicable lo que sentía, ansiaba las noches.

Quizás aquel día no te abracé, pero me encantó verte acostado a mi vera, bonita tarde.

Sé que estás conmigo, se que me cuidas y sabes todo de mí, así que no creo que necesite contarte nada, hablar contigo, ahora mismo lo hago en sueños, verte, en fotos, regalarte mi amor, lo hago cada primer día que piso tu vida. 
La verdad, es que aunque no haya tenido el placer de conocerte como a mí me hubiese gustado. Eres lo mejor de mí.

Pero una cosa si me hubiese gustado cambiar y es no haber tenido que aguantar tu fallecimiento con solo un año, porque ahora lo que más necesito, es abrazarte.



te quiero


No hay comentarios:

Publicar un comentario